El mundo de la peluquería tiene su estrella, Laetitia Guenaou

Según los profanos, la peluquería se aprende se vive en un salón, su carrera es diferente, ¿por qué? Cuando he empezado esta profesión en los años 80, la tendencia era a propósito de un negocio a lo americano, la rentabilidad, la cifra de negocio y la cifra de negocio. Fui frustrada muy rápidamente porque no había elegido esta profesión para ello, pero por pasión para la creación. Mi suerte de peinar productores, cantantes me ha permitido descubrir el mundo del cine. Mi especialidad era las películas de época bajo la influencia de Rosa de Rossi. Más tarde, el mundo de la música me ha abierto sus puertas con la creación de looks de diferentes artistas y finalmente el de la moda. Fue el mundo que he apreciado lo menos para su lado efímero, directivo u con poco fidelidad de una temporada una otra.   ¿ Pero por qué esta vuelta en la peluquería ? Fue durante un shooting de prensa que mi trabajo fue descubierto por un Michel Gardais. Lo he acompañado al Brasil para un show, ni siquiera sabía que un peluquero podía producirse en escena. ¡Me ha encantado! Estar libre de crear, expresarse. Algunas personas importantes de l’Oréal Professionnel me han contactado rápidamente en Paris, contrato firmado… y desde hace veinte años viajo por el mundo entero haciendo shows, animando seminarios, firmando colecciones.   ¿Que le trae todo eso ? Ser hairstylist es el único job que me permite desarrollar mi creatividad sin estar dirigida como en un plató de cine o por clientes en un salón. Bueno, estoy pagada para hacer ¡lo que me gusta! Vivo de mi pasión, lo mejor.   ¿Y esta materia que traba, el cabello, que enfoque tiene? Primero, me gusta precisar que entre todas las profesiones, la peluquería es la única que nos hace trabajar una materia viva. Reacciona cuando la tocas, cuando la llevas al extremo. Tienes que trabajarla con suavidad para establecer el « contacto » al fin de obtener los mejores resultados. Mi manera el cabello es en fusional. Como una planta, tienes que hacerla sentir que la quieres, tienes que hablar con ella… después, me gusta explorar otros universos para crear materias, texturas etc… Desde hace algunas temporadas, veo el cabello como tejido. Entonces puede estar undulado, plisado, mate o brillante. Mi manera de proceder evoluciona siempre. ¿ Pero qué piensan los peluqueros de sus creaciones que están muy lejos de un salón ? En cuanto a la moda, el prêt à porter y la alta costura. El primero es abordable, puede llevarse, el otro no del todo. El peluquero que asista a un show artístico viene para el sueño, una emoción, una vibración. Y es el después que transpone « importable » en el trabajo comercial. Reduce los volúmenes, se apropia una idea para hacerla evolucionar en su cotidiano, lo de las clientes. Es eso el enriquecimiento de estos momentos compartidos.   ¿Cuando sube en escena, que mensaje quieres transmitir? Quiero mostrar hasta donde se puede ir con esta materia, el cabello. Se puede crear volúmenes increíbles, formas, texturas y accesorios. Comparto también la pasión que me anima, soy maestro artesano porque trabajo con la mejor herramienta, mis manos. ¡Y eso es mágico!